Si hay algo que aprendí a lo largo de los años es a permitirme conocer bien a las personas. No soy de prejuzgar a la gente pero solía pasarme que me quedaba enganchada con cosas que pensaba de la gente y me quedaba con esa impresión para siempre. Pero en este último tiempo entendí que las personas cambian y que hay que darnos la oportunidad de aceptar los cambios. A veces para bien y otras para mal, pero la vida es así, de eso se trata crecer. Eso nos ayuda a abrir los ojos y darnos cuenta de que nada era realmente como creíamos, eso es muy sorprendente.
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