Algún día tal vez ...
No sé que me pasa, capaz la respuesta no esté
en un libro de química o en una novela. Solo sé
que cuando lo veo no paro de temblar, siento como
espasmos que suben y bajan en mi espalda, no
puedo conjugar bien los verbos, no puedo abrir la
boca para hablar, porque cuando me doy cuenta
estoy mordiéndome el labio inferior. Y que cuando
se va, ciento un nudo en la garganta y unas ganas
de gritarle “te quiero”, unas ganas tremendas de
abrazarlo y no soltarlo jamás, pero en cambio, solo
lo veo con su caminar tranquilo, y lo único que hago
es soltar un suspiro y seguir soñando en que algún
día tal vez, solo tal vez, el se imagine todo lo
que provoca en mi.
Evelyn Belamendia.